Los colorantes para cemento son unos pigmentos que se utilizan para teñir cemento, hormigón o mortero.
Puedes encontrar cemento pigmentado en terrazos y baldosas, bloques Split, placas de hormigón, morteros de hormigón impreso, incluso en barbacoas.
Un uso muy habitual de los colorantes para cemento es el de colorear muros. De esta forma el paramento o muro tendrá un color permanente e inalterable mientras se mantenga en buen estado.
Estos muros pueden formar parte de un edificio, un cercado, o estar integrados dentro de un ambiente o paisaje, y al estar pigmentados con los colorantes para cemento color tierra, podrán disminuir el impacto medioambiental. Estos muros tienen que reunir unos requisitos imprescindibles, como son el resistir la radiación ultra violeta, a la intemperie y ser estables al mezclarse con el cemento.
Los colorantes para cemento que se usan normalmente son:
– Óxidos de hierro: Para conseguir tonos rojos, amarillos o negros, y todas sus mezclas: naranjas y marrones. Son de origen sintético, es decir, se generan mediante reacción química.
– Óxidos de cromo: Se consiguen tonos verdes. Poseen una gran resistencia a los rayos UV, a las altas temperaturas y a la intemperie en general.
– Oxido de cobalto: Para conseguir tonos azules. Son muy resistentes también a la alcalinidad del cemento y los rayos ultra violeta
Factores que afectan a la tonalidad
El resultado final nunca es totalmente homogéneo. Tienes que tener en cuenta que hay ciertos factores que influyen en la tonalidad final:
– Cantidad de agua que utilices al amasar.
– El material del qué esté hecho el encofrado.
– El método que utilices para batir la mezcla
Es importante que no esperes obtener tonalidades tan homogéneas como las que podrías conseguir con una pintura. El colorido de un cemento pigmentado es más natural que el efecto que conseguirás si pintas tu cemento en bruto con cualquier pintura para exterior.
Cómo aplicar los colorantes para cemento
1. La aplicación del pigmento la puedes hacer en fábrica o en una cuba hormigonera, si se trata de cantidades grandes, o en la misma obra que estés haciendo.
2. Debes de mezclar el pigmento unos cinco minutos para que consigas un buen resultado.
3. Las dosificaciónes recomendadas están alrededor de un tres por ciento respecto del cemento. Aunque, en general, se puede decir que una dosificación estándar podría estar entre 9 y 10 kilos de colorante por metro cúbico de hormigón.
Consejo: empieza siempre mezclando un poco de pigmentos con agua para obtener un jarabe, luego introdúcelo en la cuba con el cemento, o con el yeso y haz una prueba en una esquina de la pared para ver el efecto de color.
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